
Con una sensacion termica de 37 grados en Montevideo necesito pensar en la nieve.
Desde pequeña tuve una fascinacion especial por este fenomeno que nunca pude ver en vivo y en directo. Soñaba con las casitas de los Alpes suizos, mas tarde empecé a estudiar ruso, para terminar finalmente con mi interes por los paises nordicos.
Los del norte sueñan con el calor, y yo sueño con la nieve.
Asi es como paso el verano leyendo "La señorita Smila y su especial percepción de la nieve"(1992 edición original en danés), del escritor Peter Høeg que hasta ahora va siendo muuuy interesante.
Smila pertence a la pequeña comunidad groenlandesa que emigró a Dinamarca, vive en unas viviendas subencionadas por el Estado y allí es donde conoce a Isaias, un niño groenlandes que vive solo con su madre en el mismo edificio. Isaias logra adentrar en la coraza que parece tener Smila y juntos comienzan una relación muy particular, que se vera interrumpida en el comienzo del relato por la muerte sorpresiva del niño.
La novela será la busqueda sin sosiego por parte de Smila de las razones de la muerte de su amigo. Y en esa busqueda tendrá un papel fundamental aquello que ha rodeado siempre su vida y la ha hecho ser quien es, la nieve.