miércoles, 19 de enero de 2011

palabras...

Las palabras me abandonan a veces. Se despegan de mi como llevadas por el azar, como si este fuera un viento y me las volara. Yo las veo alejarse por el aire y aunque intente atraparlas no hay remedio, porque ya no son las mismas.
Esas palabras que vuelan a otras manos ya no son las mias. Y tengo entonces que nacer palabras nuevas que tengan raices en mi, que sean bien firmes y frescas.
Cuando las nazco, las miro recorrer la hoja y me pregunto cómo serán cuando las leas, si lograré zambullirme en vos, yo junto con ellas.

domingo, 16 de enero de 2011

Empezando a subir mis escritos...

(El árbol de mi tía)
Din skog = Tu bosque


Árboles vivos, árboles gigantes
Como seres antiguos que callan
para escuchar el ruido
ensordecedor de los hombres
Caminos de piel
¿Cómo no sentirme una extraña
Perturbadora de su mundo
Mágico?
Y cuando sale el sol de repente
es como si un Dios estuviera
mirando este pedacito de tierra
y lo señalara por un segundo
y fuera como un milagro
Pero vuelve la sombra y vuelvo
a sentir que quisiera pertenecer
pero no pertenezco
Casi los toco con miedo
de ofenderlos, de que me hablen
todos al mismo tiempo
de que muevan sus ramas brazos
y me expulsen
Yo me paro frente a él
lleno de colores, áspero, liso
felpudo, indescriptible
Lo abrazo
y me siento tan pequeña
Tan frágil
que podría salir volando
sino estuviera sujetada
a sus raíces
centenarias
(Escrito durante mi viaje a Suecia en 2010)

sábado, 15 de enero de 2011

La paloma


(Imagen tomada de http://www.bonsaisgigantes.net/)

Siempre hay palomas. Caminan picoteando el suelo y revolotean a las copas de los arboles o a los techos de las casas. Caminan entre los pies de la gente sin miedo, nos esquivan, nos rodean y siguen, siempre hay palomas.


Ya no tienen miedo, estan acostumbradas a la ciudad, aunque la mayoria de la gente cree que son molestas.


Cuando era pequeña vivia frente a una plaza llena de palomas, y solia cruzar a darles miguitas de pan. A veces se dejaban agarrar, a veces comian de mi mano, y cuando queria correr salian volando para hacerme paso.


Siempre hay palomas, mi padre dice que demasiadas. Pero hoy yo vi como se iba una.


En la parada del bus para ir al trabajo, siempre son 5 0 6 caminando con sus patitas diminutas, picoteando el asfalto y dejandose mirar. Estaban ahi, solo estaba yo.


Hoy estaba especialmente mirandolas. A veces no lo hago, pienso en otras cosas, miro el reloj, leo...pero hoy las miraba y sonreia.


Bajaron a la calle, y no volaron. No entiendo porque no volaron. Y una se fué.


Senti como la camioneta la aplastaba y hacia un ruido como de bolsa de plastico con aire que explota. Todavia siento ese ruido, porque me quede estatica. No fui a buscarla, no fui a sacarla, y paso otro auto y otra vez splash, ese ruido...


No volo, y yo no aplaudi, ni grite, ni salte para que volara, y podia volar, pero no volo.


Fué ese segundo que separa la vida de la muerte, ese segundo en el que algo vivo deja de existir.


Hoy me di cuenta, de que nunca vi nada morir (salvo algun insecto), nunca vi tanta vida y tanta muerte en tan poco lapso de tiempo.

jueves, 13 de enero de 2011

El domingo pasado nos fuimos "de picnic". Agarramos cada uno un bolsito de mano con algunas cosas para comer y beber (el mate porsupuesto) y nos tomamos tempranito un bus a cualquier lugar. Si! jaja a cualquier lugar...es decir...a alguna playa de lo que se llama "La costa de oro", pero al primer nombre que leyeramos en el letrero del bus.
Terminamos entonces llegando a Solymar, una playa preciosa que es la de las fotos que postee anteriormente (ambas las del verde y las de la playa).
Enrealidad en Uruguay esta lleno de playas preciosas, y quizas en estas epocas de verano y de vacaciones en las que todo el mundo se va "cuanto más al este mejor", playas cercanas a la capital como Solymar, El Pinar, Lagomar pierdan un poco de popularidad. Pero...para el que se tiene que quedar en Montevideo trabajando y piensa "puff quiero ver una playa que no este rodeada de edificios", creo que estas playas que estan tan solo a 1 hora de viaje o menos son una buena opción para desestresarse el fin de semana.
Además en la bajada en la que estuvimos habia un puesto de pescado frito, y un parador donde comprar comida o agua caliente para el mate. Y a la tardecita...suenan los tambores!
Otro dato importantisimo! : el bus te deja en la bajada de la playa y a la vuelta lo tomas en el mismo lugar.
Así que el domingo estuvimos todo el dia en la playa, solo viendo arena y en las peores horas para protegernos del sol resguardandonos en la zona de los arbustos y luego volviendo a la arena y al agua que estaba saladisima!
Intente sacar fotos de los picaflores, pero eran tan escurridizos que no se dejaron fotografiar.:)

lunes, 10 de enero de 2011

la nature../ la naturaleza...


Un manganga amarillo :)













domingo, 9 de enero de 2011

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